¿Qué es el duelo?

El duelo genera una serie de emociones que, aunque adaptativas y necesarias, son molestas de sentir. Por ello quiero compartir en este post, algunas definiciones que te ayudarán a comprender qué es el duelo y algunos consejos que pueden ayudar a gestionar de mejor manera tus pérdidas dolorosas y situaciones de duelo, con un mayor bienestar psicológico y una adecuada autoestima.

Definición de pérdida y duelo. ¿Qué es el duelo?

Como siempre suelo comenzar, vamos a pasearnos por algunas de las definiciones de duelo de algunos de los expertos en el tema que nos ayudarán a descubrir y dar luz sobre lo que es el duelo.

• Según Bowlby, conocido psicólogo por la teoría del apego, decía que la pérdida o el duelo son “todos los procesos psicológicos, conscientes e inconscientes, que la pérdida de una persona amada pone en marcha, cualquiera que sea el resultado”.
• Me gusta mucho la definición de Jacques Derrida, filósofo francés fallecido en el 2004. Según él “el duelo consiste en el deber ético de llevar al otro que ha muerto en uno mismo, llevar para no abandonarlo, sino por el contrario, es la exigencia al superviviente”. Es bonita esta interpretación al no permitir que la persona que se ha marchado desaparezca, sino que siga viviendo en nosotros a través de los recuerdos y los aprendizajes que nos dejaron, es más, dice que es un deber y algo exigible. El señor Jacques habla de una forma muy contundente ¿verdad?
• Por otro lado, para el famoso psicoanalista ruso Igor Caruso el duelo es “una de las experiencias más dolorosas para el hombre, quizá la más dolorosa, es la separación definitiva de aquellos a quienes ama”.
• Y por último la definición que más encaja en mi forma de concebir el duelo. La OMS dice que “el duelo es la respuesta normal y natural a una pérdida humana o separación. Es también, una respuesta a cualquier tipo de pérdida, no sólo a la muerte de una persona”.

Contexto de la pérdida y el duelo

¡Efectivamente! ¿Creen que no sufre un duelo alguien que ha sido despedido de su empleo después de 20 años en la misma empresa? ¿no sufre un duelo aquel que tiene que vender su chalet y su coche de alta gama para irse a un apartamento y coger el metro porque la crisis lo arruinó? ¿no se sufre un duelo por la pérdida de la juventud? Podría alargarme en ejemplos hasta completar todo el post, pero no creo que sea necesario.

Desde mi punto de vista, a lo largo de nuestra vida sufrimos innumerables pérdidas, las más dolorosas por su irreversibilidad evidentemente son las de nuestros seres queridos, pero también hay pérdidas físicas por ejemplo la caída del cabello o la salud, o materiales como cuando ocurre una catástrofe natural y perdemos nuestro hogar, o evolutivas como la menopausia en el caso de las mujeres… etc, etc.

El duelo es un proceso natural que sufre la persona ante una pérdida que se convierte en patológico cuando es mantenido en el tiempo. Por ello es lógico que ante una pérdida se tenga tristeza, bajo estado de ánimo, ganas de llorar, enfado, inapetencia… y un largo etcétera, porque todo es admisible en una persona que pasa el proceso de ir adaptándose a la nueva vida sin aquello que ha perdido y del que tenía un gran vínculo emocional.

Yo he perdido a mis padres y a mis tres hermanos en diferentes etapas de mi vida y no hace ni un año perdí a mi perro Odín. Les puedo decir que han sido diferentes afrontamientos, todos muy dolorosos y desgarradores. Según sea la persona y la capacidad que tenga de afrontamiento lo vivirá de una manera o de otra. Con mi padre tenía 15 años en plena adolescencia y con la pérdida de mi madre ya tenía los 40. Mi afrontamiento fue distinto pues había algo que tenía cuando falleció mi madre: la madurez que me dio los años y desgraciadamente la experiencia que me dio la pérdida de mi padre y de uno de mis hermanos. Después de mi madre fallecieron mis otros dos hermanos. La serenidad con que viví mi quinto duelo me permitió despedirme de mi hermano cogiéndole la mano susurrándole palabras de despedida al oído.

Pero tengo claro que una persona que ha perdido su trabajo a los 56 años puede caer en una depresión mayor y que otra persona que pierde a su madre puede pasar un proceso natural sin caer en lo patológico.

Fases del proceso de duelo. Análisis de qué es el duelo a través de sus fases.

Otra forma de comprender qué es el duelo es analizando cada una de sus fases. El proceso natural del duelo conlleva una serie de fases. En este artículo voy citar el modelo de la psiquiatra suiza y gran estudiosa del duelo como es Elisabeth Kübler-Ross, a la cual le animo a leer su obra si quiere profundizarse en el tema.

• LA NEGACION. ¿No le ha ocurrido que cuando ha sufrido la pérdida siente que ha sido una pesadilla y que no es real? Es más, se niega a aceptar que es algo real.
• IRA. “¿Por qué a mí?” “La culpa es de este gobierno que nos ha abocado a los empresarios a la ruina”. “Los médicos del hospital no hicieron lo suficiente”.
• NEGOCIACIÓN. Es la fase más desconocida y más corta y se caracteriza porque fantaseamos como mecanismo de defensa. “Si hubiera vendido antes de la crisis…” “Si la quimioterapia hubiera funcionado como se esperaba…” “si mi casa hubiera tenido buenos materiales la lluvia no le hubiera afectado…”. Aquí ya se empieza a aceptar que lo acontecido es real.
• DEPRESIÓN. En esta fase se asume como será nuestra nueva vida sin la pérdida sufrida. Eso es desolador y muy triste. Hay que tener cuidado pues es necesaria esta fase pero durante un tiempo prudente. Si se echan amarras y nos quedamos aquí lo convertimos en patológico y necesitaríamos ayuda profesional.
• ACEPTACIÓN. Aquí la persona entra en un estado más tranquilo ya que se comprende lo que ha ocurrido y compone su nueva vida sin lo perdido.

Ya que las personas somos únicas e idiosincrásicas que nos distingue unos de otros, no todos pasamos por esas fases en el mismo orden y ni siquiera pasamos por todas, además que los tiempos en cada fase son distintos dependiendo de cada persona. Por eso estas fases son orientativas y cualquier orden es normal.

Análisis

Los duelos se sufren con el foco en el presente, lo que duele está en el ahora y es lo que molesta independientemente de otras pérdidas vividas pues cada una tiene sus características y sus niveles. Por eso recomiendo no subestime el dolor ajeno ni haga comparaciones. Me explico, como anteriormente he hecho referencia, en abril de este mismo año en mi familia dijimos adiós a nuestro perro Odín. En casa lloramos y sufrimos su pérdida, ¿cree que era comparable el dolor al dolor de la pérdida de mi madre? Por supuesto que no. Pero en ese momento mi foco estaba en su ausencia, al silencio sin sus ladridos y a que no estaba a mis pies cuando se me caía algo de comida cuando cocinaba, ni que no subía al sofá a ver mi serie favorita. No me hubiera sentado nada bien que alguien me hubiera dicho que no era para tanto.

Por eso desde mi experiencia como persona y profesional le aconsejo respeto ante el dolor de las personas independientemente de lo que hayan perdido. El embargo de una casa por no poder pagar su hipoteca es el dolor presente en ese momento en la vida del afectado y no es subestimable. Recuerde que el proceso de duelo aparece cuando perdemos algo o alguien y hay que componer tu vida con esa falta.

Agradezco que haya llegado hasta aquí y espero que, a través de este post, haya podido tener una idea más clara de lo que es el duelo. Seguiré escribiendo más artículos sobre la pérdida y el duelo, pero si quiere que se haga de algún tema relacionado no dude en pedírmelo lo escribiré encantada.